El fuego es eternamente destructor
Las diosas vuelven a su rol, inalcanzable e inmortal. Los espejos seguirán reflejando aquello que nunca podremos tocar. Es mejor no desviar los rios de su cauce ya que el agua que traen no siempre nos tienen que dar de beber. Siempre es mejor calentarse con el fuego a una distancia prudencial antes de acercarnos para tocarlo y consumirnos en las llamas de aquello que no es de nuestra misma naturaleza constructora. El fuego es eternamente destructor mientras tenga víctimas como nostros para alimentarse. La fiebre también calienta cuando tenemos frio, pero nos enferma.
Los objetos de culto no tienen propiedad, las divinidades son de todos y la debilidad de unos cuantos que poseemos la fe de no ascender. El oro solo es una piedra preciosa, el dinero es algo valorado. Pero son solo objetos.
Los caminos no son fáciles, las bandejas de plata no están hechas para nosotros, así has podido convertirte en eterna, en mejor, en sumemente interesante. Nunca las nereidas tuvieron que ser pasatiempos. Nunca ganaremos la guerra. Nunca seremos estrellas. Nunca nos encontrarán. A veces la esperanza es lo primero que se pierde.
No tengo branquias ni aletas, pero el oleaje me hace bucear. Tu navegas en velero y yo jamás aprendí a caminar sobre el mar. Tú haces que me ahogue en el agua justo cuando me moría de sed. Tu haces que se me nuble la mirada tan solo con el movimiento de tus dedos. Tienes la batuta de una orquesta de arcoiris. Tienes la visión oscura de una tarde de amargura.
Hay un rayo de Luna filtrandose por la tela de araña, es tu recuerdo que suena entre el viento, me protege en medio de un huracán que transporta mi casa a otros mundos mientras yo duermo placidamente en mi cama con un rostro sonriente. No importa desde que altura caiga ni el daño que me haga, no hay peligro mientras imagino un beso de la Luna, de mi Luna. No importa cuantos cañones me apunten si muero escuchando tu nombre. No importa la amenaza cuando la suerte ya está echada.
Tus ojos son dos mundos planetarios que crecen cada vez más con la llegada del coyote. Te veo viajar de norte a sur, de este a oeste pero cuando pasas por mi tierra vuelas alto como el Sol. Quiero viajar a los horizonates para encontrarme contigo de cara. Quiero ver si el mago hace trucos o tiene magia. Quiero vestirme con tu aura, quiero fundirme en tu karma, quiero que un beso desencadene fuegos artificiales, alarguen las agujas de los relojes haciendolos girar sin sentido y que la Tierra zigzaguee por el sistema solar como una bailarina repleta de felicidad. Quiero que un beso responda a las preguntas más difíciles jamás planteadas, quiero que un beso repoble los árboles caducos en el otoño y llene los desiertos de la vegetación floral más diversa, quiero que un beso..... sea el fuego eternamente desturctor mientras tenga vícitimas como yo para alimentarse.
Los objetos de culto no tienen propiedad, las divinidades son de todos y la debilidad de unos cuantos que poseemos la fe de no ascender. El oro solo es una piedra preciosa, el dinero es algo valorado. Pero son solo objetos.
Los caminos no son fáciles, las bandejas de plata no están hechas para nosotros, así has podido convertirte en eterna, en mejor, en sumemente interesante. Nunca las nereidas tuvieron que ser pasatiempos. Nunca ganaremos la guerra. Nunca seremos estrellas. Nunca nos encontrarán. A veces la esperanza es lo primero que se pierde.
No tengo branquias ni aletas, pero el oleaje me hace bucear. Tu navegas en velero y yo jamás aprendí a caminar sobre el mar. Tú haces que me ahogue en el agua justo cuando me moría de sed. Tu haces que se me nuble la mirada tan solo con el movimiento de tus dedos. Tienes la batuta de una orquesta de arcoiris. Tienes la visión oscura de una tarde de amargura.
Hay un rayo de Luna filtrandose por la tela de araña, es tu recuerdo que suena entre el viento, me protege en medio de un huracán que transporta mi casa a otros mundos mientras yo duermo placidamente en mi cama con un rostro sonriente. No importa desde que altura caiga ni el daño que me haga, no hay peligro mientras imagino un beso de la Luna, de mi Luna. No importa cuantos cañones me apunten si muero escuchando tu nombre. No importa la amenaza cuando la suerte ya está echada.
Tus ojos son dos mundos planetarios que crecen cada vez más con la llegada del coyote. Te veo viajar de norte a sur, de este a oeste pero cuando pasas por mi tierra vuelas alto como el Sol. Quiero viajar a los horizonates para encontrarme contigo de cara. Quiero ver si el mago hace trucos o tiene magia. Quiero vestirme con tu aura, quiero fundirme en tu karma, quiero que un beso desencadene fuegos artificiales, alarguen las agujas de los relojes haciendolos girar sin sentido y que la Tierra zigzaguee por el sistema solar como una bailarina repleta de felicidad. Quiero que un beso responda a las preguntas más difíciles jamás planteadas, quiero que un beso repoble los árboles caducos en el otoño y llene los desiertos de la vegetación floral más diversa, quiero que un beso..... sea el fuego eternamente desturctor mientras tenga vícitimas como yo para alimentarse.
2 comentarios
Marta -
Adiós, Tierra firme.
Luna blanca -
Un beso, ser estupendo ;)