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En Tierra Firme

El espíritu de Don Quijote es el espíritu de Chiquilicuatre y de España

El espíritu de Don Quijote es el espíritu de Chiquilicuatre y de España

Don Quijote fue la parodia y la burla de un bufón llamado Cervantes en una época de pocas luces y mucho oro. Cervantes consiguió reírse de todo aquello que le rodeaba y creó a Don Quijote, el caballero idealista, pero viejo y débil, que luchaba sin miedo contra cualquier enemigo que se ponía por delante.

Chiquilicuatre y su Chiki-Chiki conserva ese espíritu español y cervantino que nos identifica. Llegó a una gala repleta de cachitas de gimnasio y de Top models repletas de silicona que nos hicieron creer que en vez de estar ante un concurso de canciones era un concurso de ver quién podía llevar la falda más corta.

Chiquilicuatre era la burla de todos ellos, era su caricatura, pero muchos de los que participaron, incluidos los ganadores, no lo sabían. Chiquilicuatre era la ironía del concurso, y la ironía es la figura literaria que utilizan los inteligentes, en este caso los grandes comunicadores Buenafuente y Emilio Aragón, y que muchos no supieron comprender.

Decir que el Chiki-Chiki era una canción con poca calidad es tan absurdo como quejarse de que en nuestras monedas de euro nos está representando un personaje literario que no sabía combatir y estaba como un cencerro, y que eso no es serio para representarnos en las monedas de euro.

Así como en algunas monedas de euro sale nuestro gran personaje con el que nos burlamos de las novelas de caballería del momento, nuestro Chiquilicuatre ha conquistado Europa para burlarse de las canciones de discográfica y de cachitas sin talento.

Asumamos que tenemos un carácter quijotesco y que esta es nuestra seña de identidad. Riámonos de nosotros mismos. No seamos Sanchos Panzas como siempre. Sigamos siendo Quijotes y lúcidos.

Para contribuir a ello debemos ir a esta Eurocopa pensando que vamos a ganar, como Don Quijote pensaba que ganaría todas sus batallas. Ganaremos a un equipucho de tercera fila y automáticamente pensaremos que hemos derrotado a un gigante peligroso y nos creceremos. Pensaremos que vamos a ganar con nuestra armada invencible, que en realidad es mediocre como Don Quijote y somos un equipo que se cree mucho más de lo que es y que piensa que con su Rocinante Aragonés podremos derrotar a ejércitos armados hasta los dientes.

Y cuando fracasemos en esta Eurocopa pongamos cualquier excusa y levantémonos de nuevo pensando en nuestro próximo objetivo. Digamos que hemos sufrido el efecto de un encantamiento, pero nunca, repito, NUNCA, digamos que somos mediocres.

Con Chiquilicuatre, Don Quijote y nuestra Selección Española, seguiremos siendo la nación que siempre fuimos.

Hasta la derrota siempre. Pero eso sí, al menos ríete.

4 comentarios

Sonia -

un olé por tí,si señor, no dejas (ni dejes) de maravillarme.... muy buena crítica. Ya está bien de hacernos los listos entendedores de todo, cultos y respetuosos con esa media conciencia tan rancia, no perdamos ese espíritu que nos caracteriza...

Medicine woman -

Un buen análisis, digno de leer en algunos de los mejores periódicos. Serías un buen crítico cultural. Chapeau por este certero, original y sencillo post.

Noelet -

Claro que sí!!
En mi opinión Rodolfo fue lo más fresco de Eurovisión, y hizo un poco más "real" ese viejo consurso, repleto de participantes carrozas o tan desfasados que parecen un chiste!
Europa perreó! :D

Vanity Dust -

Tienes razón, hemos perdido pero con orgullo. Que les den a los cachitas y a las guarras.

Te he enlazado en mi blog. Sería un orgullo y un honor estar en el tuyo.

Saludos